Tenemos la obligación nuevamente de dejar constancia de otro asesinato contra un campesinado de la zona, es demostración clara de la situación dramática que se esta viviendo en Urabá.  

  • El día 18 de septiembre hacia la 1 p.m. fue asesinado al frente de la salida del Terminal de Transportes de Apartadó HECTOR JAIME OROZCO GRISALES de 26 años de edad, fue abordado por un hombre de civil y con arma corta se le acercó y le hizo varios disparos. Este hombre se le ha visto continuamente en el Terminal con otros hombres y son paramilitares reconocidos. JAIME no hacia parte de nuestra comunidad pero era un campesino conocido que se había dedicado a aserrar madera, a la agricultura y vivía actualmente en Playas Altas a treinta minutos de San Josesito. El asesinato ocurrió en medio de un lugar de gran presencia policial.

Es evidente el accionar paramilitar y la complicidad de la fuerza pública, pues los asesinos actúan libremente en una zona controlada por la fuerza pública como es el Terminal de transportes, los paramilitares son públicos y a la vista de todo el mundo y no se hace absolutamente nada. Es preocupante y angustiante el asesinato continuo de que se esta siendo víctima el campesinado de la zona, con el silencio y la complacencia de las diversas instituciones del estado que dejan en  la total impunidad el actuar paramilitar que sigue mas activo que nunca.  

Nuestra solidaridad para con su familia y sus cinco hijos pequeños, creemos que estas acciones en contra de la vida del campesinado, de la población civil, nos reafirman en nuestra opción por construir y defender la vida desde nuestros principios de paz. Pedimos la solidaridad nacional e internacional para exigirle al estado que cese este exterminio que se sigue realizando contra la población civil. Queremos aprovechar para compartir la respuesta del padre Javier al comandante de la policía de Urabá donde se ve con claridad la distorsión de la verdad por parte de los victimarios.  

COMUNIDAD DE PAZ DE SAN JOSE DE APARTADO

Septiembre 19 de 2007