En medio de dos mundos que se presentan, uno la realidad de las víctimas y otro el que se dice en discursos y papeles, es necesario que nosotros, las víctimas dejemos constancias de lo que se vive diariamente, pues en el discurso del estado todo marcha bien, todo esta arreglado, en el día a día que nos toca vivir solo vemos acciones de terror por parte del estado que busca exterminarnos. Es necesario dejar memoria de los hechos como una acción moral y para que algún día después de euforias distractoras que no muestran la realidad pueda la humanidad juzgar las atrocidades que vivimos las víctima. Los hechos que dejamos a la historia son:
El día 15, 16 y 17 de julio el ejército se ubicó en la escuela de la Resbalosa, esta escuela pertenece y funciona con la Comunidad de Paz donde reciben clase 14 niños de la Comunidad y que había sido acondicionada en circunstancias difíciles, ya que la instalación está en pésimas condiciones, pero se estaba comenzando a educar alternativamente con un tablero, lápices, cuadernos y sillas de madera rusticas en medio de un esfuerzo de dignidad, esto fue destruido por el ejército y además de ello dejó letreros que dicen «fuera niños guerrilleritos y campesinos guerrilleros que hacen daño a Colombia».
– El día 16 de julio el ejército llegó hacia las 10 a.m. a la casa de JUAN GRACIANO y DORA GRACIANO en la vereda la Resbalosa, ellos no hacen parte de nuestra comunidad pero son campesinos de la zona, ellos fueron ultrajados por el ejército tratándolos de guerrilleros y que los iban a asesinar si los volvían a encontrar en la casa.
– El día 14 de julio hacia las 3 p.m. dos soldados entraron al caserío de San Josesito perteneciente a nuestra comunidad, allí fueron abordados por dos miembros de la comunidad que les manifestaron que estaban en propiedad privada y que por favor se retiraran, les dijeron además que en la entrada estaban claros los principios de la comunidad, los militares comenzaron a insultarlos diciendo que la comunidad era guerrillera, que ellos no sabían leer que hacían lo que se les daba la gana y no tenían freno con nadie, que la comunidad era una hormiga que ellos la aplastaban cuando se les diera la gana haciendo lo que quisieran, de nuevo se les reiteró que por favor se retiran de la comunidad que era propiedad privada y estaba prohibido el paso y estaban violando la ley, los dos militares contestaron que se iban porque sino la comunidad los asesinaba, los dos miembros de la comunidad les manifestaron que respetaran la comunidad, los dos militares salieron.
– El día 6 de julio en la vereda Mulatos hacia las 11 a.m. fue abordado por el ejército ARNULFO DIAZ perteneciente a nuestra comunidad, el ejército comenzó a preguntarle que si era de la comunidad, él respondió que sí, los militares comenzaron a decirle que la comunidad tenía un retorno en Mulatos pero eso era pura guerrilla y que ellos iban a sacar a esa gente de las veredas, que la comunidad lo que generaba era problemas ya que por esa h.p. comunidad guerrillera no se podía hacer orden a la forma que ellos querían, que esa h.p. comunidad se valía solo de las leyes y para ellos la ley la ponían con el fusil. Le dijeron que tenía que llevarlos a donde estaban los demás miembros de la comunidad, él les respondió que no guiaba a ningún actor armado, que los miembros de la comunidad estaban en las diversas veredas y que teníamos claro los principios y no necesitábamos estar llevando a ningún actor armado a nuestros lugares de vivienda. Finalmente le dijeron los militares que si abría la boca ya sabían ellos quien era y la tenía que pagar caro.
Todo este cúmulo de hechos deja muy en claro una estrategia de persecución y exterminio contra nuestra comunidad, las amenazas y la intimidación se hacen constantemente para querer doblegarnos y dejar nuestros principios, sin embargo se equivocan los victimarios ya que la dignidad de las víctimas no retrocede a las acciones de muerte, por el contrario se enfrentan sembrando vida y generando alternativas día a día, por ello seguimos mas firmes que nunca en nuestros principios, creemos que una nueva realidad se construye desde esas pequeñas búsquedas, esas acciones de vida, muy insignificantes a los ojos de la prepotencia, del poder, de los amos de la muerte pero que son las que edifican la dignidad y la conciencia de una nueva humanidad.
El exterminio contra la comunidad es una realidad que vivimos y por ello queremos frente a todos estos hechos aprovechar y poder compartir la carta enviada por el Padre Javier Giraldo al señor Carlos Franco de la vicepresidencia, donde se puede constatar claramente el aniquilamiento del que somos víctimas por parte del estado en su estrategia paramilitar.
COMUNIDAD DE PAZ DE SAN JOSE DE APARTADO
JULIO 19 DE 2008